la calle, lentamente se despeja
de reseca hojarasca, que en su queja,
va llenando de voces la alborada.
Y juega con mi mano, iluminada,
tu melena entre oros y bermeja,
mientras lenta, la luna, ya se aleja
por el mágico rito obnubilada.
Resistencias del ansia, que inmolada,
ya vencida y silente, va perpleja,
por tu talle, tejiendo la madeja
de esta letra final de madrugada
y un ensueño de amor, que se refleja,
en el musgo otoñal de tu mirada.
"Cien Poemas de Amor"
©Copyright 2003 - Derechos Reservados
No hay comentarios.:
Publicar un comentario